domingo, 27 de abril de 2008

Sposalizio del mare, los esponsales de Venecia con el mar

"Desponsamus te, mare. In signum veri perpetuique domini", cada año el día de la Ascensión desde principios del siglo 1177, el Serenissimo Doge de Venecia recitaba estas palabras mientras arrojaba un anillo consagrado durante el "Sposalizio del Mare", una ceremonia de carácter casi sagrado, en la que de manera simbólica la República de Venecia desposaba el mar.

Esta celebración conmemoraba dos victorias venecianas. La primera de ellas, la del Doge Pietro Orseolo II que partió el 9 de Mayo del año 1000, el día de la Ascensión, en ayuda de las ciudades de Dalmacia que sufrían constantes ataques de los piratas croatas y eslavos. La victoria sobre los piratas constituiría el inicio del lento camino de Venecia para dominar el Mar Adriático una vez libre de piratas.

Como recuerdo de esta empresa se creó la Festa della Sensa (día de la Ascensión en veneciano), en un inicio era aún ceremonia modesta y simple que tenía un carácter de súplica y expiatorio. Un solemne procesión de embarcaciones, guiada por la galera oficial del Doge, el Bucintoro, usada casi solamente durante esta fiesta , salía de la laguna atravesando la boca del puerto del Lido. Donde delante de la iglesia de San Nicolo, patrón de los navegantes, recitaba una plegaría "per noi e per tutti i navigatori il mare possa essere calmo e tranquilo" que pedía la tranquilidad de los mares para los navegantes venecianos. Posteriormente todos eran bendecidos con agua bendita.

Pero fue otra victoria, en este caso diplomática, la que confirió a esta fiesta su carácter más solemne y glamuroso. Fue en 1177, cuando el Doge Sebastiano Ziani, acogió a las dos autoridades más importantes de la época que estaban enfrentadas, el Papa Alejandro III y el Emperador Federico Barbarossa, en la Basílica de San Marcos, y consiguió que ambos firmaran un tratado de paz. El Papa como agradecimiento por tales favores, le concedió al Doge un anillo bendecido que simbolizaría el dominio perpetuo de la República Serenissima de San Marcos sobre el mar.

Fue a partir ese año 1177, cuando la ceremonia adquirió un carácter cuasi-sacramental. Cada año el Doge, subido en el Bucintoro, acudía a la Iglesia de Santa Elena en San Pietro de Castello, donde el obispo en un bote con bordes dorados le estaba esperando, listo para bendecirlo. Para evidenciar el dominio de la Serenissima sobre el mar, la fiesta tenía que terminar con una ceremonia propiciatoria, por eso el Doge en la boca del puerto de San Nicolo arrojaba el anillo de oro al mar Adriático, mientras decía las palabras con las que desposaba el mar, declarando Venecia y el mar indisolublemente uno.

Además el Papá Alejando III concedió indulgencias a todos lo que visitaran la Basilica de San Marco durante los 8 días (más tarde serían 15) siguientes a la celebración. El incentivo religioso de obtener el perdón divino atrajo multitudes de peregrinos a la laguna durante la celebración, que se sumaron a los que ya habitualmente se concentraban para esas fechas en la ciudad, esperando partir hacia Tierra Santa en los barcos venecianos. El carácter veneciano inclinado a combinar lo sagrado y lo profano, propició que en 1180, durante la fiesta se llevara a cabo un feria para mostrar los productos de los mejores artesanos locales así como mercancías de Oriente.

En un inicio esta feria fue organizado sobre botes de madera, pero más tarde, en 1534, pasó a celebrarse en la Plaza de San Marcos donde el arquitecto Sansovino, diseñó una especie de tenderetes de madera. La feria se convertiría en una de las más importantes de la época en Europa. Posteriormente en el 1777 el recinto sería substituido por un edificio elíptico diseñado por el arquitecto Maccaruzzi, esta construcción de madera pero sin clavos permitía ser desmontada en tres días y vuelta a montar en tan sólo cinco.

La fiesta que según algunos podría tener un origen incluso anterior, Bizantino o incluso relacionados con alguna celebración pagana relacionada con Neptuno, se sigue celebrando hoy en día, aunque con mucho menos glamour. Pese a ello, el primer domingo después del día de la Ascensión, el alcalde de la ciudad, acompañado por otras autoridades cívicas, religiosas y militares, en un pequeño Bucintoro acude al puerto de San Nicolo donde procede con el ritual de arrojar el anillo de oro al Adriático, renovando una vez más la unión perpetua de Venecia con el Mar.

PS: Este año la Festa della Sensa/Sposalizio del Mare se celebrará el próximo domingo 4 de Mayo.

*foto 1: Miniatura del siglo XVI, la paz entre Alejandro III y Federico Barbarossa.
*foto 2: Salida del Bucintoro hacía San Nicolo en el Lido, pintura de Francesco Guardi

*foto 3: Nueva fiera della Sensa, óleo del siglo XVIII por Gabriel Bella


posts relacionados:
- Perasto, el último suspiro de la Serenissima
- El arsenal de Venecia, la primera fábrica de la historia

+info:
- Bucentaur/The Marriage of the Sea in en.wikipedia.org
- The Festival of Our Lady of the Assumption in Venice and the Wedding with the Sea in veniceexplorer.net
- La Festa della Sensa e lo Sposalizio del Mare en Fondazione Bucintoro
- The Sensa Feast-day in City of Venice web

No hay comentarios: