martes, 21 de septiembre de 2010

Bermeja, la isla que México perdió en los mapas

Según varios mapas históricos, los más antiguos de los cuales datan del siglo XVI, al norte de la Península del Yucatán, mar adentro, se encuentra una isla llamada Bermeja. Aunque su presencia se repite en mapas posteriores, hoy en día, todos los intentos de dar con ella han acabado en fracaso. Pese a todo, algunos se preguntan cómo puede ser que una isla, que aparecía en mapas oficiales mexicanos de mediados del siglo XX, se haya podido perder.

Mapa de Nicolás Sanso (1657) en la que aparece Bermeja

Las primeras representaciones del Golfo de México muestran la Península del Yucatán como una isla. En estos primeros mapas, además, se puede advertir de la presencia de una serie de islotes y bajos sin nombre situados al norte del Yucatán.

Aunque, según el historiador y cartógrafo Michel Antochiw, es en 1535 es cuando la isla Bermeja aparece, por primera vez, con ese nombre sobre un mapa. En concreto, se trata de uno bastante preciso del Golfo de México realizado por el portugués Gaspar Viegas. En dicho mapa, la Bermeja aparece acompañada por la isla de Alacranes. Ambas islas seguirán apareciendo, con o sin nombre, en mapas portugueses posteriores, desde los que saltaran a los franceses debido a la estrecha relación existente entre cartógrafos lusos y galos.

Unos años después de aparecer en el mapa de Viegas, la Bermeja también emerge de entre las aguas en los mapas realizados para España por el cartógrafo veneciano Sebastiano Caboto y publicados en Amberes en 1544. En torno a la península del Yucatán aparecen, además de Bermeja, la isla Triángulo, la isla de Arenas, Las Arcas, Triángulo, la isla Negrillos y el arrecife de Alacranes.

Unos años más tarde, en 1571, el mismo Sebastián Caboto comienza la redacción de la Geografía de las Indias. Aunque no puede acabarla al fallecer al año siguiente y tiene que terminar su obra el cosmógrafo del Rey, Juan López Velasco. Eran tiempos en que la elaboración de mapas era considerada una cuestión de estado y su elaboración se llevaba casi en secreto y no es de extrañar que las seis copias de la Geografía fueran guardadas bajo llave.

En esta obra, se advierte del peligro que suponen para la navegación las islas Triángulos, la Zarca, la de Arena, la de Bermeja y la de Negrillos. Aunque no parece que se hubiera realizado ninguna verificación sobre el terreno de la existencia de ninguna de todas ellas.

Además de en estos y otros mapas, durante este tiempo, la Bermeja también aparece en numerosos derroteros, en los cuales los exploradores describen las rutas, las costas o los fondos y otros peligros que pueden aguardar a los pilotos que naveguen por esas aguas. Sin embargo, a comienzos del siglo XIX la situación cambia. Durante 1804 y 1805, Ciriaco de Cevallos realiza levantamientos cartográficos de la zona en la que se suponía que estaban la isla Bermeja y las demás, pero no encontró ni rastro de Bermeja ni, tampoco, de la isla de Negrillos. Cevallos afirma que “esta isla que se sitúa en todas las cartas es de muy dudosa existencia”.

Según Michel Antochiw, a partir de entonces más que existir dudas de la existencia de Bermeja, se comienza a estar bastante convencido de que no existe. Pero, a pesar de ello, la isla no cae en el olvido y acabará siendo rescatada por los cartógrafos mexicanos en varios mapas de carácter oficial del siglo XIX y de principios del XX. Todo esto pese a no tener constancia de que existiera ninguna verificación marítima de su existencia.

De esta manera, en 1864 la isla aparece registrada en la “Carta Etnográfica de México” y en el libro de las “Islas Mexicanas”, editado por la Secretaría de Educación Pública, que la sitúa en 22⁰ 33′ latitud norte y a 91⁰ 22′ oeste. El mismo libro sostiene que algunas agencias federales de Estados Unidos reconocen su existencia. Pese a que resultaba imposible dar con ella, Bermeja continuó apareciendo en algunos mapas oficiales de México hasta 1946.

Isla Pérez en el Arrecife de Alacranes. ¿Tendría Bermeja, de existir, una pinta similar?

Como suele pasar en este tipo de historias sobre islotes remotos, la Bermeja tiene mucho más valor del que podría tener un pequeño trozo de tierra en medio del mar. Con el paso de los años y mediante la firma de varios tratados, Cuba, Estados Unidos y México han ido delimitando las fronteras de sus zonas económicas exclusivas en el Golfo de México. Sin embargo, existen dos áreas, conocidas como “hoyos de dona”, que aunque están fuera de ellas, han quedado totalmente rodeadas por los aguas territoriales de dos o más países. Formalmente, no pertenecen a nadie, hasta que los países colindantes decidan fijar sus límites ante la Comisión de Límites de la Plataforma Continental de la ONU.

El occidental se encuentra frente a las costas de Texas y sus recursos se los tendrían que repartir entre México y Estados Unidos. En el oriental, que se encuentra entre las costas de Nueva Orleans y el Yucatán, Cuba también entraría en el posible reparto.

En el caso del hoyo occidental, el reparto de los 22.500 millones de barriles de petróleo que se supone podrían estar esperando en su fondo sería muy diferente de poderse encontrar la isla Bermeja. De confirmarse su existencia, México podría extender 55 kilómetros mar adentro su zona económica exclusiva en esa zona del golfo, lo que en la práctica le supondría pasar de controlar el 60% del hoyo ,que le corresponde según los tratados actuales, a controlarlo en casi su totalidad.

Es por ello que cuando México, a finales de los 90, comenzó las negociaciones con Estados Unidos para delimitar la plataforma continental entre ambos países más allá de las 200 millas náuticas de sus respectivas zonas económicas exclusivas, volvió a intentar dar con la isla Bermeja.

Vista general del Golfo de México del Mapa de las Indias Occidentales del 1796 hecho por Capitán inglés Joseph Smith Speer. Original interactivo

Detalle del mapa anterior en el que aparte de Bermeja se pueden ver Triángulos, Arcas, Negrillos y Arenas.

En septiembre de 1997, el Ministerio de Marina mexicano envió un buque oceanográfico a la zona. Aunque el barco rastreó más de 300 millas náuticas cuadradas en torno a su supuesta posición, no encontró ni rastro de Bermeja. En las coordenadas donde debía estar la isla, el fondo marino se encontraba a 1.472 metros de profundidad y era plano, por lo que no sólo la isla no estaba allí, sino que, además, parecía descartarse la posibilidad que lo hubiera estado alguna vez.

Al no encontrarse Bermeja, fueron las islas del Arrecife de Alacranes las que sirvieron de referencia a México para delimitar los límites con el vecino del norte.

Como resultado de las negociaciones, el gobierno mexicano consiguió que el del Hoyo de Dona y los demás yacimientos petrolíferos situados en la nueva frontera marítima quedaran protegidos por una moratoria que impedía a ambos países realizar ningún tipo de prospección hasta 2010. Era una manera de evitar que los norteamericanos extrajeran petróleo de estos yacimientos mediante la succión lateral y, al mismo tiempo daba tiempo a la petrolera mexicana Pemex a hacerse con los equipos necesarios para la extracción de petróleo a más de 3.000 metros de profundidad.

Con muchos barriles de petróleo en juego, México volvió a buscar la isla Bermeja en marzo de 2009. Esta vez por encargo de la Cámara de Diputados mexicana , la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) envió su buque oceanográfico a explorar la zona. Se llevaron a cabo mediciones con ultrasonidos hasta una profundidad de 472 metros y se examinó un área de más de 220 kilómetros cuadrados. El intento no tuvo éxito, si bien no se descartaba que la isla pudiera encontrarse en otras coordenadas diferentes o que hubiera existido, pero hubiera desparecido a causa de un deslizamiento geológico.

Dos meses después, en mayo, fue el barco Río Tuxpan de la Armada de México el que intentó encontrar la isla. El Río Tuxpan tampoco tuvo suerte y tampoco consiguió dar con la isla, llegando a la conclusión que lo más posible es que Bermeja sólo hubiera sido un error cartográfico.

Los Hoyos de Dona

Finalmente, fue la Televisión Azteca la que decidió patrocinar otra expedición marítima para encontrar Bermeja. La expedición, que contaba con medios técnicos más limitados que las dos anteriores, tampoco pudo dar con la isla.

Aparte de por mar, durante todo este tiempo, la isla también ha sido buscada desde el aire, aunque en todos los casos el resultado ha sido el mismo que desde el mar: ni rastro de ella.

Sin embargo, todas estas evidencias no han conseguido convencer a todos de la no existencia de esta isla que hasta hace tan poco aparecía en mapas de México. De hecho, incluso entre los dispuestos a admitir que ya no existe, hay los que creen que ello no significa que no haya podido existir, por lo que buscan posibles explicaciones a su desaparición.

Algunos políticos mexicanos creen que la isla Bermeja habría sido un arrecife coralino o un banco de arena, pero habría desaparecido a causa de algún maremoto. Otros creen que la culpa la tiene el aumento del nivel del mar causado por el calentamiento global. Según estos últimos, Bermeja descansaría ahora sumergida un metro por debajo del nivel de las aguas.

Una última versión, aún más conspirativa, achacaría la desaparición de la isla a la mismísima CIA,que debido a su importancia económica la habría dinamitado. Además, estos políticos sospechan que durante la negociación del tratado del año 2000, los negociadores mexicanos sabedores de las riquezas petrolíferas que escondía el fondo del Hoyo de Dona occidental pudieron haber hecho un uso privilegiado de esa información en beneficio propio.

No obstante, la explicación que, según los expertos, parece más verosímil es que Bermeja nunca existió, sino que se trata de una isla fantasma más. Es decir, una isla que aparece en los mapas históricos durante un tiempo y va pasando de unos mapas a otros hasta que finalmente se comprueba que no existe. Algunas de estas islas fantasmas surgieron al ubicar incorrectamente islas reales, aunque otras sí que pudieron haber existido, pero al tratarse de islas muy frágiles (bancos de arenas, arrecifes o conos volcánicos) acabaron desapareciendo. ¿Sería Bermeja una isla de este último tipo, tal como defienden algunos políticos mexicanos?

PS: Bermeja no es la única isla mexicana desparecida de los mapas. Tampoco se ha podido encontrar Negrillos ni otros cuantos cayos o bajos similares.

Gracias a Jesús Marmolejo por avisarme desde México D.F de la existencia, o no existencia, de esta isla.

Enlace permanente a Bermeja, la isla que México perdió en los mapas

+posts:
- Ferdinandea, la isla que vino, se fue y tal vez vuelva
- Rockall, la roca en medio del mar
- El archipiélago de Svalbard
- Tavolara, el que fue el reino más pequeño del mundo
- San Pedro y Miquelón

+info:
- Isla Bermeja en es.wikipedia.org en.wikipedia.org
- La isla Bermeja en los textos de y la cartografía(PDF) de Michel Antochiw Kolpa para INEGI
- México busca la isla del tesoro en ABC.es
- Número 195 de la Gaceta del Senado Méxicano
- Oil boom fuels mystery of the missing island in the Mexican Gulf in The Times
- Van diputados en busca de la Isla Bermeja en ElPorvenir.mx

32 comentarios:

Anónimo dijo...

Lo de la subida de 1 metro del nivel del mar por el calentamiento global que solo afecta a una isla, roza el delirio. La noticia publicada en 'La cronica de hoy' solo puede estar redactada por un becario o por alguien muy ignorante. Por cierto, todos los veranos se derrite parte del hielo del polo, y el nivel del agua no sube ni un centimetro debido a ello, porque como cualquier estudiante de fisica elemental sabe, si dejas que un cubito de hielo se derrita en un vaso colmado, el vaso agua no se derrama (he intentando poner un ejemplo grafico y cotidiano).

Guillermo dijo...

Genial como siempre bovolo!

Bovolo dijo...

Desde luego que las opiniones de las que se hace eco ese artículo son un tanto rocambolescas.

Otras opciones para explicar su desaracición parece más creíbles.... Otras aún menos, esos sí.

Muchas gracias, Guillermo! Un placer!

Borja dijo...

Hola Anonimo,

"Por cierto, todos los veranos se derrite parte del hielo del polo, y el nivel del agua no sube ni un centimetro debido a ello, porque como cualquier estudiante de fisica elemental sabe, si dejas que un cubito de hielo se derrita en un vaso colmado, el vaso agua no se derrama"

Referente a eso que dijiste, para hacer una analogia exacta, hacia que decir si en dicho vaso sobresaliese por fuera varios cubitos de hielo (aun estando dentro del caso). En ese caso si que es probable que el agua se derrame, de la misma forma que el hielo que existe en la Antartida por ejemplo no esta a nivel exacto del mar, de hecho el promedio es de 2000 metros (siendo el continente mas elevado de la tierra sobre el nivel del mar) llegando en algunos casos a 5 km de espesor de hielo sobre el nivel del mar.

Anónimo dijo...

exacto, como dice overdrive, la cuestión es que grandes masas de hielo se encuentran sobre tierra

Anónimo dijo...

En realidad la isla Bermeja era una plataforma ovni encallada en el mar. Ahora está en el Área 51. Dónde estaba la plataforma sólo queda un pequeño cráter, cómo ha documentado el prestigioso ufólogo Jaime Vélez. Existe una petición extraoficial del gobierno de México para acceder a los informes clasificados sobre dicha plataforma, pero su existencia ha sido, una fez más, denegada.

Anónimo dijo...

Es fácil, es la Isla de Lost ;D

Bovolo dijo...

Esto del vaso y del cubito lo tengo que probar en casa ... con una bayeta vileda por si acaso jajaja!

Porque es cierto que el agua tiene mayor densidad que el hielo, pero...

Bueno voy a buscar la bayeta, que con este tipo de cosas siempre se puede ganar unas pintas en una reunión de amigos ;-)

Lo de la plataforma OVNI no se puede descartar. Te has dejado que los que hicieron los mapas antiguos fueron abducidos y llevados a la nave con la hermana de Mulder... Con eso ya está todo explicado :-D

Umm, lo de Lost también podría ser una explicación ;-)

Anónimo dijo...

Habrá que encontrala, porque yo no la tengo.

Interesante el texto.

Pumuky dijo...

Como no podía ser de otra manera,una curiosa noticia la que nos acercas GRAN Bovolo.
Muchas gracias por tu trabajo,un saludo y hasta la próxima.

RarOwaR dijo...

Podría ser un espejismo como San Borondón al norte de Lanzarote

Bovolo dijo...

Muchas gracias, Pumuky! Siempre un placer verte por aquí.

Bienvenido RarOwaR!

Interesante la historia de esa isla. Creo que merece una investigación. Desde luego que estos temas de islas fantasmas siempre son interesantes.

Saludos para los dos!

Miguel Vivas dijo...

Gracias por volver a ilustrarnos amigo mío, me encantan tus enigmáticos textos. Un abrazo.

Bovolo dijo...

Todo un placer, Miguel ;-

Anónimo dijo...

como siempre, interesantisimo, saludos desde Mexico! y un comentario adicional: se dan cuenta de los dolores de cabeza, rios de tinta, millones de dolares, en fin, todas las consecuencias que ha traido un error cometido hace cientos de años? que por comodidad fue repetido-repetido-yvuelto a repetir... creo que el dibujante aquél (probablemente portugues) jamas se imagino las consecuencias de "imaginarse" una isla ahí.

Bovolo dijo...

Anónimo, muchas gracias por tu comentario. Un placer que te haya gustado.

En el texto de Antochiw habla del concepto "fotocopia" entre mapas. Es decir, mapas que se basan en otros anteriores y, claro, replican sus exactitudes, pero también sus errores.

En su favor, hemos de decir que por lo menos nos ha entretenido un rato ;-) Él y los demás que la reflejaron en sus mapas, que creyeron que existía.

Saludos desde este lado del charco!

Golias dijo...

Me recuerda a la Tierra de Sannikov, que sirvió en parte de inspiración a a la aventura gráfica "Syberia". Es curioso ver que la Wiki tiene una sección completa dedicada a las islas fantasmas. A ver si le echo un vistazo detenidamente esta tarde, que el tema tiene su jugo. Gracias por el comentario, me has llevado a una nueva y divertida forma de perder el tiempo...estooo, de aprender curiosidades (soy un bocazas).

Bovolo dijo...

Jajaja, Golias!!

Buscar islas fantasmas puede ser una provechosa manera de emplear el tiempo.

Imagina que encuentras alguna isla por ahí que sea española. Quizás pillemos algo de petroleo y se acabe la crisis ;-)

Un abrazo!

PS: Oro, también valdría que está por las nubes ;-)

Bovolo dijo...

Por cierto, lo de la Tierra de Sánnikov parece interesante... Habrá que investigarla ;-)

Gracias, Golias!

Ferrantatachan dijo...

Estaría bien que en España se pagase a la universidad para que busque la isla de San Borondón. Cosas más tontas se han visto. Esta isla también aparecía en los mapas antiguos y puede que así ganemos unos terrenos buenos para urbanizar que nos saquen de la crisiss.

Golias dijo...

Sobre este tema, hay un libro de 1969 bastante divertido de Forrest David (en realidad el pseudónimo de dos autores que trabajaban juntos), en el que un inglés hereda una isla perdida en el Atlántico, y se le ocurre vendérsela a la Unión Soviética. Lleva el explicativo título "Y A Mi Sobrino Albert Le Dejo La Isla Que Le Gané A Fatty Hagan En Una Partida De Póquer".

Bovolo dijo...

Ferran... Por favor, no des ideas, no des ideas jajaja!

Golias, otros se juegan un cortijo, ¿qué hay de malo en jugarse una isla? Espero que le dejara las coordenadas GPS... porque con esa descripción, la única manera que tenía el sobrino era preguntando a Fatty Hagan.

Me apunto el libro, si es sólo la mitad de bueno del título... Ya debe de ser bueno ;-)

Saludos!

Pedro Loarces dijo...

Me llamó la atención encontrar Isla Bermeja en BlooSee a través de wikipedia. En BlooSee se pueden geolocalizar lugares de interés histórico, naufragios, leyendas del mar y muchas cosas más... Este es el link: http://www.bloosee.com/infopoints/-/-/isla-bermeja/ Saludos

Diego González dijo...

Échale un vistazo a esto, primo :)

http://www.lavanguardia.es/lv24h/20101015/54023047567.html

Sobre todo el último párrafo, que es lo interesante.

Bovolo dijo...

Muchas gracias, Diego!

Estás hecho todo un mediático ;-) Además, felicidades, que el artículo te ha quedado muy bien.

Saludos!

estonoesunblogdehistoria dijo...

Me gusta pensar que aún quedan lugares por redescubrir, o reencontrar

Bovolo dijo...

Desde luego!

Quizás estés en lo cierto y un día se reencuentre este trocito de tierra ;-)

Saludos!

Anónimo dijo...

Seguro que con Google Earth aparece

Bovolo dijo...

No des ideas ;-)

Tripiyon dijo...

Interesante historia.
Saludos

Tripiyon

Guillemro fonseca dijo...

Faltó el extenso reportaje que BBC Mundo publicó sobre el tema

http://www.bbc.co.uk/mundo/a_fondo/cluster_isla_bermeja_dc.shtml

Bovolo dijo...

Muchas gracias, Guillermo, por el enlace!

Solo he tenido tiempo de ojearlo, pero parece muy completo. No entiendo como en su día no di con él :-(

Bienvenido!